La localidad de Pedroche con los tejados cubiertos de nieve. Foto: RAFA SÁNCHEZUn arroyo de Los Pedroches. Foto: RAFA SÁNCHEZImagen de Dos Torres. Foto: RAFA SÁNCHEZNevada en Añora. Foto: RAFA SÁNCHEZNevada en Hinojosa del Duque. Foto: CHEMA MURILLO
Plaza de la Iglesia de Pozoblanco nevada. Foto: RAFA SÁNCHEZLA CRÓNICA Y LAS INCIDENCIAS DE LA NEVADAUn vez más la nieve tiñó de blanco este martes a los municipios de Los Pedroches, cuyos habitantes se despertaron con una nevada que llegó a ocupar entre cinco y diez centímetros de espesor en calles y carreteras, después de que la nieve empezara a caer desde las 23.00 horas del lunes, de forma copiosa.
Fuentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil informaron a nuestra redacción que a la 1.45 horas de la madrugada del lunes al martes se produjo el corte del tramo de la N-502, entre Alcaracejos y Espiel, para vehículos pesados al comprobar que dos de ellos, así como un turismo, se habían quedado inmovilizados entre los kilómetros 374 y 380, coincidiendo con la subida del Puerto de Calatraveño. Los agentes tuvieron que utilizar cadenas para acceder a algunos de los vehículos inmovilizados, y palas para apartar la nieve y poder retirar a los vehículos que se encontraban detenidos en mitad de los carriles, para que no obstaculizaran el paso de las máquinas quitanieves.
Posteriormente, alrededor de las 4.00 horas de la madrugada, con motivo del cese de la nevada tras el paso de la máquina quitanieves, se reanudó la circulación con precaución, especialmente a comprobarse la existencia de placas de hielo y grandes concentraciones de nieve en la mayoría de las carreteras.
Aunque la nieve afectó a todas las carreteras, las que más sufrieron esta inclemencia meteorológica fueron la N-502 y la A-424, entre Pozoblanco y Cardeña. La circulación por esta última presentaba gran dificultad ya que los neumáticos perdían gran parte de su adherencia, lo que obligó a los operarios de mantenimiento de carreteras a arrojar sobre ella sal.
Por fortuna, la nevada cayó en horas de escasa circulación lo que provocó que no hubiera accidentes de relevancia. Los primeros rayos de luz permitieron ver el paisaje nevado y poco a poco el sol fue derritiendo la nieve hasta el punto de que al mediodía ya apenas eran visibles los restos de la intensa nevada que dejó una temperatura mínima de -4,5 grados en Villanueva de Córdoba.
ANTONIO MANUEL CABALLERO - REDACCIÓN INFORMATIVOS PUNTO RADIO POZOBLANCO