Bonito gesto: El Juli no quiso salir por la Puerta Grande y salió de la Plaza por la puerta de la enfermería ya que quiso conocer el estado de su compañero José Luis Moreno:
El segundo festejo de la Feria Taurina de Pozoblanco incluía un mano a mano entre José Luis Moreno y El Juli en Córdoba que comenzó con muy mal pie. El diestro de Dos Torres ha sido cogido durante la faena de muleta a su primer toro de Jandilla, que le ha inferido una cornada en el muslo derecho cuando intentaba un pase de pecho. Moreno dejó hueco, el toro lo vio y derrotó y lo empitonó limpiamente en el muslo (VEA EL PARTE MÉDICO EN LA NOTICIA ANTERIOR O PULSANDO AQUÍ).
Tras quedarse a matar a su toro, ha pasado a la enfermería sangrando abundantemente y su cuadrilla saludó la oreja concedida. El toro tuvo fondo encastado, se desplazó y humilló en las telas y tuvo buen son, sobre todo por el pitón izquierdo, por el que el torero cordobés consiguió los mejores momentos de su labor.
El Juli, por tanto, se tuvo que ver con cinco toros. El segundo de la tarde, de Núñez del Cuvillo, fue un gran toro, siempre a más y con gran profundidad. El de Cuvillo ya hizo el avión de salida y Julián lo lanceó con hondura y gusto. Con la muleta firmó un trasteo redondo y pleno, con variedad. Faena profunda y cuajada en la que destacó el toreo ligado y de mano baja. Aunque se pidió el indulto para el animal, El Juli no dio lugar y mató de forma contundente de un espadazo. El premio para el toro, la vuelta al ruedo. Para el torero, las primeras dos orejas.
El tercero llevaba el hierro de Fuente Ymbro y, aunque tuvo el defecto inicial de moverse con la cara a media altura, terminó entregándose, siempre con fijeza y sacando el fondo. El Juli, técnico y pausado, fue metiendo poco a poco al animal en un trasteo poderoso que acabó provocando embestidas humilladas al de Ricardo Gallardo, que se fue al desolladero sin las dos orejas después de otro espadazo efectivo del madrileño.
Al cuarto de la tarde, con el hierro de Jaralta, El Juli lo recibió con lances rodilla en tierra y una media de hinojos. El animal, muy templado, permitió al madrileño torear al ralentí en un trasteo en el que disfrutó e hizo disfrutar.
El quinto, de Daniel Ruiz, fue un animal noble y suave al que recibió con una larga en el tercio. El toro pronto se fue a las tablas y allí hizo su faena Julián, que lo exprimió. Los cambiados por la espalda, los circulares y los remates pusieron la sal, y solo el uso del descabello le privó de pasear una oreja.
Al sexto, un gran toro de Victoriano del Río, El Juli puso banderillas. Después empezó la faena citando de largo y dando distancia a un animal con transmisión y que se rebosaba en la muleta. Humillaba mucho por el pitón izquierdo, el mejor del animal, al que toreó con gusto y poder en un trasteo redondo. El diestro madrileño, variado y capaz, lo cuajó de principio a fin. Cortó el rabo sin discusión después de dejar la quinta estocada de la tarde.
POZOBLANCO, 25 DE SEPTIEMBRE
2ª de Feria. Casi lleno.
Toros de Jandilla, encastado. Núñez del Cuvillo, bravo, premiado con la vuelta al ruedo. Fuente Ymbro, manejable. Jaralta, noble y dulce, aunque falto de fuerzas. Daniel Ruiz, manso. Victoriano del Río, bravo.
José Luis Moreno: oreja en el único que mató (la vuelta al ruedo la dio su cuadrilla).
El Juli: dos orejas, dos orejas, dos orejas, saludos tras petición y dos orejas y rabo.
