El Ayuntamiento de Pozoblanco conmemora este año el Centenario de la plaza de toros de la ciudad, que fue inaugurada el 25 de agosto de 1912, y pretende convertir el Coso de los Llanos en un referente turístico y cultural con motivo de esta destacada efeméride. Así lo han señalado el alcalde de Pozoblanco, Pablo Carrillo y la concejala de Turismo, Paqui Fernández, que han presentado este viernes 20 de enero en la Feria Internacional de Turismo (FITUR 2012) de Madrid esta conmemoración. En el acto han estado acompañados por la presidenta de la Diputación, María Luisa Ceballos y por la presidenta del Patronato Provincial de Turismo, Rosario Alarcón. También estuvo presente el presidente de la Mancomunidad, Juan Díaz.
En ABC Punto Radio Pozoblanco te hemos contado en directo desde Madrid la presentación y si lo deseas la puedes volver a escuchar a continuación.
MARÍA LUISA CEBALLOS, PABLO CARRILLO Y PAQUI FERNÁNDEZ:
El Ayuntamiento de Pozoblanco, a través de la Concejalía de Turismo, ha cerrado ya las primeras actividades que se van a celebrar en el que será el año taurino por excelencia de Pozoblanco, donde cada mes, desde febrero a diciembre, se celebrarán distintas acciones relacionadas con el mundo del toro, la cultura y el turismo y la afición a la Fiesta. La filosofía organizativa de este centenario, que cuenta con el asesoramiento de una comisión en la que tienen representación el equipo de gobierno municipal, aficionados, toreros, periodistas y presidentes de la plaza de toros, quiere mostrar Los Llanos como un recinto íntimamente ligado a la historia de la ciudad y para ello se van a realizar acciones dirigidas a todos los públicos y que tendrán como máxima la interacción con la Fiesta de los toros desde distintas perspectivas. El objetivo es por tanto dar la mayor difusión posible a las potencialidades de un valor tan importante para la localidad como la plaza de toros.
Las actividades que están preparando el Ayuntamiento y la comisión podrían dividirse en distintos capítulos, pues los espectáculos taurinos de septiembre, que serán el centro natural de todos los actos del centenario, se sumarán otros espectáculos de carácter extraordinario que se están perfilando, aunque más allá de las corridas de toros y novilladas en sí, el Ayuntamiento quiere que la plaza sea un elemento vivo. Así, el Ayuntamiento ha previsto la instalación de una exposición fotográfica permanente en la plaza de toros durante este año que se inaugurará en el mes de marzo. También está prevista una semana de puertas abiertas del coso para los colegios de Pozoblanco del 16 al 20 de abril, cuyo objetivo es acercar la historia y la relevancia de la plaza a quienes son el futuro de la Fiesta.
Una de las apuestas más importantes de este centenario es acercar los entresijos del mundo del toro y de la vida de los toreros a aficionados y no aficionados de una forma interactiva. Para ello, los matadores de toros José Luis Moreno y Alberto Luna y los ex novilleros Andrés Cantero y Antonio Blanco van a impartir clases de toreo de salón a lo largo de distintas jornadas a participantes de todas las edades. Esta actividad se complementará con la concentración nacional de aficionados prácticos que tendrá lugar el próximo mes de abril en Pozoblanco y que tiene como objetivo reunir a aquellas personas que sin ser profesionales del toro torean de forma esporádica en capeas y tentaderos. Una jornada campera en el coso de Los Llanos el 22 de septiembre, en el fin de semana de antes de la celebración de la Feria taurina, completará este tipo de actividades relacionadas con el mundo del toro más allá de la celebración de corridas y novilladas. Así, se tentarán vacas y se explicará a los asistentes cómo se realizan las pruebas de bravura en el campo.
Un recital de poesía relacionado con el mundo del toro, un desfile de moda flamenca de Francisco Tamaral, un concierto de bandas de música centrado en los pasodobles más toreros y la celebración del Congreso Nacional Taurino dedicado a la memoria de Paquirri entre los días 8 y 11 de noviembre completan este avance de actividades que se presentará en la Feria de Abril de Sevilla, en San Isidro y en la Feria de Mayo de Córdoba.
LOS RECINTOS TAURINOS DE POZOBLANCO HASTA LA NUEVA PLAZA:
La obra ‘Los toros en Pozoblanco’ de Manuel Moreno Valero explica de forma sucinta las raíces de la Fiesta en Pozoblanco y la fuerte relación que la localidad tuvo siempre con la tauromaquia en sus distintas vertientes históricas. Pozoblanco, localidad de amplia tradición ganadera y cercana a Castilla contó siempre con capeas y encierros que con el paso de los años fueron cayendo en desuso a favor de la celebración de corridas de toros y festejos ‘formales’ desde el siglo XIX. Dice Moreno Valero en la citada obra que hay datos fechados en el siglo XVII y a principios del XVIII que atestiguan la celebración de espectáculos taurinos en lo que hoy es la calle Mayor de Pozoblanco, bien en forma de encierros bien en forma de capea caballeresca más o menos organizada. Más allá de estas celebraciones de carácter festivo y enraizadas en el carácter del pueblo, el autor de la citada obra describe en un amplio anecdotario cómo el Cabildo que entonces gobernaba el Concejo disponía de los materiales necesarios para celebrar estos festivales en las distintas fiestas de localidad.
No fue hasta finales del siglo XIX cuando Pozoblanco contó con la primera plaza estable, que no de obra. Estaba enclavada en la zona conocida como El Torilejo. Pero tanto ésta como el resto de plazas levantadas en las afueras de la localidad en corralones de piedra y con graderíos de maderos, sólo acogieron festejos menores en las ferias y la creciente población de Pozoblanco y las del entorno, enriquecidas en parte por el desarrollo de la minería, comenzaron a reclamar una plaza de toros fija. Fue entonces cuando Joaquín García Gómez y Rafael Bueno Roldán deciden impulsar la construcción del actual coso, que bautizaron con el nombre de Plaza de toros de Los Llanos, debido a su ubicación en el paraje denominado los Llanos del Pilar.
Para el festejo inaugural se contó con la presencia de Fermín Muñoz ‘Corchaito’ y de Martín Vázquez, quien sustituyó a Manolete (padre), que había sido cogido en Bilbao. Los toros fueron de la ganadería de la Viuda de Soler-Lisazzo. La corrida se llenó y según reflejan las crónicas de la época tuvo un gran impacto en todas las localidades cercanas a Pozoblanco, con lo que se vaticinaba que la localidad se convertiría en centro taurino de Los Pedroches y de las comarcas aledañas desde aquel momento y hasta nuestros días.
EL PAPEL DE UN COSO CENTENARIO:
La Feria taurina de Pozoblanco es un referente del final de la temporada taurina. Coincidente o cercana según las fechas con las de San Miguel, en Sevilla; Feria de Otoño, en Madrid, o Logroño, entre otras de menor importancia, el ciclo pozoalbense se ha abierto un importante hueco en el calendario del mundo del toro justo cuando termina el verano. Pese al solapamiento con los citados ciclos, la Feria de las Mercedes tiene su hueco en todos los medios de comunicación especializados y en muchos generalistas, sobre todo desde que en los años 80 se hiciera cargo de la gestión de la plaza uno de los grandes empresarios taurinos de la historia, Diodoro Canorea, empresario hasta su fallecimiento de la Maestranza.
El desgraciado suceso de Paquirri contribuyó a la dimensión mediática de una plaza que ya antes de que esto ocurriera llevaba años programando festejos con las máximas figuras. Pero si importante fue el relanzamiento de la plaza en los años 80, no lo fue menos el papel del Ayuntamiento, propietario del Coso desde 1981, y de los empresarios que durante los últimos 100 años han gestionado la plaza, a lo que hay que añadir el constante respaldo de afición que ha tenido siempre la Feria de Pozoblanco. Eso ha permitido que desde que la plaza se inaugurara el 25 de agosto de 1912 hayan pasado por Pozoblanco diestros tan importantes durante el primer tercio del siglo XX como Corchaíto, Martín Vázquez, Machaquito, Rodolfo Gaona, Camará, Zurito, Juan Belmonte, Gallito de Zafra, Rafael Gómez ‘El Gallo, Nicanor Villalta, José García ‘Algabeño’ o Manolete, que actuó como novillero un año antes de la Guerra Civil, que supuso el lógico paréntesis.
Las estrecheces de la posguerra no son impedimento para que el centenario delcoso de Los Llanos siga acogiendo festejos taurinos en una ciudad devastada por la contienda, aunque la vuelta de las figuras no se producirá hasta 1943. Ese año torean en la feria Pepe Dominguín y Rafael Martín Vázquez. En años sucesivos, en las décadas de los años 50 y 60, pasarán por Pozoblanco Cayetano Ordóñez ‘Niño de la Palma’, Luis Miguel Dominguín, Aguado de Castro, El Choni, pepe Luis Vázquez, Manuel Álvarez ‘Andaluz’, José María Martorell, Manuel Calero ‘Calerito’, Chamaco, Antonio Ordóñez, Jaíme Ostos o Pablo Lozano.
Los años 60, al igual que en toda España y gracias a la irrupción de El Córdobés, constituyen una época dorada para el toreo y a las figuras que pisan los Llanos se une toda una pléyade de toreros locales, de Córdoba y de las provincias limítrofes que actúan en Pozoblanco. La plaza, durante esta década y en parte de la siguiente, se convierte casi en un coso de temporada y se hacen famosas las novilladas nocturnas que contaban las aperturas del coso por llenos de aficionados ávidos de ver a los novilleros de la tierra. Fue la época de El Cordobés, que consiguió algunos de los llenos más memorables de la historia de la plaza de toros. Junto al V Califa actuaron en repetidas ocasiones el local Rafael Montero ‘Rafalete’ y los que más adelante serían matadores de toros cordobeses José María Montilla, El Pireo, El Puri o Zurito. En esta época se dieron más novilladas que corridas, sobre todo porque aparte de Rafalete, en Pozoblanco surgieron novilleros como El Niño Cupido, José Pastor, Andrés Garrido, Artemio Calero o Alberto García, entre otros. Entre tantas novilladas se dio sin embargo alguna corrida con figuras de la época y cabría destacar las actuaciones de Limeño, César Girón, Miguelín, El Inclusero, Palomo Linares, José Julio y Juan José, entre otros diestros.
Pero pasada la sequía taurina de los 70 y la falta de espectáculos de calidad durante esta década llegan los 80, el Ayuntamiento se hace con la plaza y Canorea se hace cargo del coso. Desde entonces hasta hoy han pasado casi todas las figuras del toreo de las últimas tres décadas desde los hermanos Campuzano a Manzanares pasando por Espartaco, Ponce o Joselito. También los toreros banderilleros tuvieron un sitio importante en la plaza. Capitaneados por El Soro por las circunstancias que todo el mundo conoce, han actuado Esplá, Victor Mendes o Morenito de Maracay. En esta plaza ha habido sitio también para artistas tan renombrados como Curro Romero, Rafael de Paula, Julio Aparicio o Emilio Muñoz, Ortega Cano, Finito o Juan Mora. También en los últimos 15 años se ha contado con todos los toreros de la nueva hola como El Juli, Morante, Talavante o Perera. No hay que olvidar tampoco a José Luis Moreno, torero de Dos Torres que ha realizado grandes gestas en la plaza de Pozoblanco. Como muestra, cabe destacar su encerrona ante una corrida de Victorino Martín, un festejo que fue un gran éxito artístico y de público.
UN CONGRESO PARA RECUPERAR LA FIGURA DE PAQUIRRI:
El Ayuntamiento de Pozoblanco ha previsto la celebración de un congreso nacional taurino dedicado a la memoria de Paquirri que tendría lugar en noviembre y para el que se quiere contar con periodistas, escritores taurinos y toreros de la época de Francisco Rivera. Esta convocatoria es una de las grandes apuestas de los actos del centenario y pretende recordar la figura de uno de los diestros más importantes del siglo XX cuya imagen está ligada a la plaza de Pozoblanco desde la fatal tragedia ocurrida el 26 de septiembre de 1984. Además, el Ayuntamiento quiere rendir público homenaje al diestro dedicándole una vía pública como muestra de respeto.