El Ayuntamiento de Pozoblanco le dedicará una calle al torero Francisco Rivera "Paquirri" y celebrará este año un congreso nacional dedicado a su memoria para "rendir homenaje" al diestro, que falleció tras una cornada en nuestra localidad.
El Ayuntamiento de Pozoblanco está preparando un amplio programa de actividades para conmemorar el centenario de la plaza de toros de Los Llanos, que fue inaugurada el 25 de agosto de 1912. Para ello, el Consistorio pozoalbense ha creado una comisión compuesta por miembros del equipo de gobierno municipal, toreros, periodistas y aficionados vinculados con la ciudad con la que se pretende coordinar los actos del centenario, que se prolongarán durante todo el año.
El objetivo primordial de la celebración de la efemérides reside en la difusión de la historia y del conocimiento de una plaza de toros por la que han pasado buena parte de las principales figuras del toreo del último siglo.
La plaza de toros de Los Llanos se convertirá por tanto en centro de unos actos conmemorativos que además tienen como fin el relanzamiento de la cultura taurina y el acercamiento de los valores del mundo del toro a la población en general mediante eventos en los que se pondrá de manifiesto la importancia de la Fiesta en Pozoblanco a lo largo de los últimos 100 años.
La comisión del centenario ultima un completo programa definido mediante distintos ejes temáticos. La afición y su relación con el Coso de Los Llanos es uno de ellos. Para esto se contará con encuentros de peñas taurinas, reuniones de aficionados prácticos y conferencias. Otra de las líneas en las que se desarrolla el programa es la del acercamiento a la fiesta de los toros, para ello se realizarán visitas guiadas a la plaza de toros en las que participaran grupos de aficionados, colegios, asociaciones culturales y todo aquel que lo desee.
Además, se plantean clases de toreo de salón dirigidas por matadores de toros y encuentros de aficionados prácticos tanto en la plaza como en otros escenarios de Pozoblanco. Otro de los ejes que aborda este año taurino es la relación del toreo con otras artes y disciplinas. Así, está prevista la celebración de exposiciones de cartelería, de pintura, de fotografía; desfiles de moda, conciertos y espectáculos flamencos, todo ello con la plaza de toros centenaria de fondo.
En el apartado estrictamente taurino, Pozoblanco contará con sus habitual Feria de Septiembre, que tendrá un matiz especial en esta ocasión, y está prevista la organización de espectáculos taurinos de carácter extraordinario que aún están por definir. A ello hay que añadir que se impartirán clases prácticas con escuelas taurinas en forma de tentaderos en la plaza de toros durante el año.
El programa de actividades será presentado el próximo viernes 20 en el Pabellón de Andalucía de Fitur, aunque está previsto que se dé a conocer también en la Feria de Abril de Sevilla, durante la celebración de San Isidro en Madrid y en Córdoba, coincidiendo con el Mayo Festivo.
HOMENAJE A PAQUIRRI
El Ayuntamiento de Pozoblanco ha previsto la celebración de un congreso nacional taurino dedicado a la memoria de Paquirri para el que se quiere contar con periodistas, escritores taurinos y toreros de la época de Francisco Rivera. Esta convocatoria pretende recordar la figura de uno de los diestros más importantes del siglo XX cuya imagen está ligada a la plaza de Pozoblanco desde la fatal tragedia ocurrida el 26 de septiembre de 1984. Además, el Ayuntamiento quiere rendir público homenaje al diestro dedicándole una calle, como muestra del respeto y el cariño que siente Pozoblanco hacia el malogrado matador.
CIEN AÑOS DE HISTORIA
La relación de Pozoblanco con la Fiesta de los toros data de tiempo inmemorial. En el Archivo Municipal de Pozoblanco hay evidencias de la celebración de espectáculos taurinos de distinta índole y en diversos escenarios desde el siglo XVII. La calle Real y la calle Mayor, antes conocida como Callejón del Toro, fueron asiento de festejos populares ya en la Edad Moderna, y en distintas ubicaciones de la ciudad de Los Pedroches se celebraron novilladas y corridas a lo largo de los siglos en cosos portátiles de madera. Es el caso del conocido como Corralón del Vélez, ubicado en la zona de Cantarranas, muy cerca de donde luego se levantó la actual plaza de toros en 1912. Este coso, que primero fue de hierro y luego de piedra de granito de cantería, fue inaugurado el 25 de agosto de 1912 y en el cartel inaugural figuraron Fermín Muñoz “Corchaito”, natural de la cercana localidad de El Viso, y el cordobés Manuel Rodríguez “Manolete”, que no pudo asistir al evento por haber sido cogido de gravedad días antes y tuvo que ser sustituido por Martín Vázquez. Los toros fueron de la ganadería de Lisazzo.
