Como marca la tradición, la salida del Carro de la Comida este sábado al mediodía ha servido un año más para comenzar los
actos que, conforme al ceremonial de siglos pasados, constituyen la
Romería de la Virgen de Luna. Con mucha gente en el centro de Pozoblanco, y especialmente en la Plaza Cronista Sepúlveda, los hermanos han hecho sonar sus escopetas y el olor a pólvora ha impregnado las calles. Otro sonido de la mañana fue el toque del tambor por parte de Teodoro Cardador. El Carro recorrió las principales calles del centro como Real, Jesús, Plaza de Santa Catalina o Mayor.
Tras el reparto de altramuces y la colocación por parte del capitán de la Cofradía, Juan García, de un chorizo de grandes dimensiones al Carro, éste ha continuado su camino hasta el Arroyo Hondo tirado otra vez por el mulo "Romerito". Esta noche a las 20.45 horas en El Silo, Juan Guijo Castro pregonará la Romería.