En la madrugada del jueves 31 de enero al viernes 1 de febrero por
última vez Epremasa ha vaciado los contenedores de residuos verdes y amarillos
con ruedas en las calles de Pozoblanco. Y desde la mañana del viernes 1 quedan abiertos los nuevos
contenedores soterrados. Ayer tuvo lugar una exhibición del sistema de vaciado de los nuevos contenedores en el Paseo de la Herradura.
Después de varios meses de obras, los tradicionales
contenedores verdes y amarillos han sido sustituidos por 53 puntos soterrados
distribuidos por toda la localidad y con la ventaja de permitir a los vecinos el
depósito de basura a cualquier hora y día de la semana. Además, no provocarán
olores.
Epremasa ha invertido en la actuación alrededor de 750.000 euros y el recibo sube para los usuarios a partir de ahora una media de 1 euro más IVA al mes.
Epremasa ha invertido en la actuación alrededor de 750.000 euros y el recibo sube para los usuarios a partir de ahora una media de 1 euro más IVA al mes.
El nuevo sistema prevé en cada punto de recogida un buzón de
depósito para restos orgánicos y otro para envases, y, además, se han unido a
ellos los contenedores para papel-cartón y vidrio.
Los nuevos vehículos adquiridos por Epremasa para prestar el
servicio están dotados de una grúa especial para la manipulación de los
contenedores soterrados, ya que su descarga requiere de una altura aproximada
de 8 metros .
La manipulación se realiza a través de un sofisticado sistema de radiocontrol,
que incluso permite el arranque y parada del motor de los vehículos desde más
de 15 metros
de distancia.
Los contenedores soterrados vienen acompañados de polémica
por la mayor distancia que a partir de ahora tendrán que realizar algunos
vecinos para depositar la basura, por la colocación de los mismos ya que en
no pocos casos se han ubicado restando espacio a las escasas zonas verdes existentes
en la ciudad o en lugares pocos apropiados como el nuevo bulevar que implica la obligación de cruzar la calzada y sin paso de peatones. Desde el Consistorio se señala que la ubicación se ha decidido entre los técnicos municipales de Obras y los de Epremasa.
Cuando el contenedor está sobre el depósito del camión se abre el hueco inferior y se vacían los residuos:
Los operarios realizando la demostración por radiocontrol:
El camión de Epremasa viene provisto de una grúa para extraer y manipular el contenedor:
Volviéndolo a colocar en su lugar:
Al acto acudieron el presidente de Epremasa, Julio Criado, y el segundo Teniente de Alcalde, César Bravo:
La transformación de este servicio implica la estricta prohibición del abandono de bolsas de basura, restos de cartonaje u otros residuos junto a los buzones o en los alrededores de los contenedores.
Por otro lado, Epremasa ya puso en marcha el pasado mes de
noviembre el Servicio de Recogida de Cartonaje Comercial, “Ecocomercio”, al que
ya están adheridos más de 150 comercios minoristas de la localidad y que
consiste en recoger este tipo de cartonaje dos veces por semana siguiendo un
recorrido establecido por las arterias principales del núcleo urbano. Este servicio está directamente vinculado a la nueva
modalidad de recogida soterrada y responde a la necesidad del sector de dar
solución al problema de la gestión diaria de los residuos de cartón.